viernes, 22 de enero de 2010


Paraiso
II


El cielo se derrite, se vuelve todo anaranjado
Corramos antes de que sea tarde
Que el tiempo corre detras nuestro y muy rápido.
La selva en la que nos condenaron a gozar de libertad es extensa
No te pierdas, memoriza el camino lo más que puedas.
Arañas de mil ojos, víboras que te muestran lo equivocado que estás, tucanes que lanzan hongos esquizofrénicos.
Cocos caleidoscópicos.
Sigamos al viento, salgamos a volar
Qué importa si terminamos tirados en el suelo del infierno arrastrandonos
Mientras San Pedro toca el sitar.
Imaginatelo, no cierres los ojos, no te duermas.
Y viaja con tu mente.


jueves, 21 de enero de 2010


Paraiso



Perderme en el humo de tus mentiras resulto ser increiblemente fácil,
vos parpadeas y mi ingenuidad hace todo lo demás.
Como un niño siendo seducido por el caramelo más caro y dulce me dejo llevar a tu solemne paraiso, conociendo el gris desenlace.




martes, 19 de enero de 2010


Hoy, llueve.


Una vez más la lluvia marca lo que menos queriamos, la partida...
Luego de tantas aventuras, con esa música selvática saliendo de los picos de aquellos pájaros. Cada paso que dábamos significaba un sonido que se acoplaba al resto de los sonidos, pues dimos millones de pasos ese día. Nuestro andar, cuatro jóvenes, simples orugas caminando por lo jamás explorado.
Conteniendo las carcajadas para que las señoras no se espanten, cubriendo la felicidad con chistes sin sentidos, ansiabamos la llovizna.
Hoy llueve, si.. Lluvia serás mi compañera de viaje una vez más.

domingo, 10 de enero de 2010

jueves, 7 de enero de 2010

7:10


La simulación de nuestra existencia
alcanzará su fin en la mismisima locura.
Aquella que nos impuso el pensamiento.
Abordamos falsedades en forma de ideas,
para apretar el cuello de la irracionalidad,
cayendo así en la decencia.
Reprimimos los instintos y nos transformamos
-sin duda alguna-
en una pieza más.
Usados, gastados y cansados nos dejamos ir.
Insatisfechos merodeamos una y otra vez,
como si eso pudiera llegar a salvarnos,
al contrario...
Nos arrastra aún más.
Ni un salvavidas de sentimientos,
tampoco una fuerte mano extendida.
Olas de inseguridad.

lunes, 4 de enero de 2010


La gente a veces se detiene en situaciones que no deberian tener valor alguno, o en cosas que dicen no importarles, como yo escribiendo esto.. Como vos leyendolo.

Tengo a la ruina durmiendo detras mio, en mi cama, reposando su aroma a caos altanero. Me veo obligado a flotar en este espacio entonces para que no me afecte, aunque de todas formas todo siempre todo repercute en mí todo.
Vaya uno a saber qué clase de sueños ciclotímicos debe estar teniendo, ¿Serán como los mios?
Quizás se levante su sombra aprovechando mi distracción y me apuñale como ella lo hace con sus palabras.
O tal vez lo haga yo primero...


Alguien está señalandote.